La transición energética ha dejado en la agenda los problemas y amenazas existentes tanto en el mundo de las operaciones como en el tecnológico, siendo los ciberataques uno de las mayores preocupaciones por lo vulnerable que se vuelven los sistemas de transmisión, principalmente.

En el sector energético chileno actualmente existen 237 sistemas de operaciones y de control que están expuestos a internet, dentro de los cuales 37 son vulnerables y 24 tienen sus bases de datos expuestas a ciberataques.

Mariana Portela, senior account manager de Cisco, dejó en evidencia lo anterior durante el conversatorio “Ciberseguridad y energía”, organizado por WEC Chile y donde se abordaron los principales riesgos, desafíos y propuestas en esta materia.
“Los ciberataques en el sector energético a nivel mundial crecieron en un promedio de 41% durante el primer semestre de 2019”, señaló la experta.

De acuerdo al Global Risks Report 2020 del World Economic Forum, en el primer lugar del ranking están los riesgos asociados al cambio climático y en la segunda posición aparecen todos los que tienen relación a factores tecnológicos, como los ciberataques o interrupción de redes de información.

Óscar Álamos, jefe de la Unidad de Gestión del Ministerio de Energía, planteó que la actual transición energética ha aumentado los niveles de competencia en el mercado eléctrico, “donde hay cada vez más datos, con una dimensión digital que se transmite bidireccionalmente, lo que significa dar protección a la data de los clientes”.

A su juicio, en el futuro “van a haber mayores niveles de vulnerabilidad de los que existen hoy”, por lo que dijo que el desafío del sector “es promover y desarrollar una cultura de la gestión de riesgos que va desde la decisión de concientización de todas las instituciones hasta cómo se concibe la toma de decisiones para hacer frente a estos riesgos”.

Álamos sostuvo que también es necesario que las empresas del sector avancen en la cooperación y el intercambio de información, pues “esto es relevante en un mercado eléctrico que es competitivo, por lo que se requiere ser abierto y transparente para evitar propagaciones al sistema”.

En tanto, Ricardo Seguel, director de Smart Center de la Universidad Adolfo Ibáñez, afirmó que el actual escenario de pandemia ha aumentado el riesgo de ciberataques, debido a la digitalización de las empresas.

Según el especialista, actualmente se ha producido una convergencia entre las tecnologías de información y las tecnologías operativas, aumentando el uso de sensores en la industria de la energía, con el respectivo almacenamiento de datos.

Mencionó que esta realidad ha provocado un incremento de 300% de ataque a tecnologías de información en el mundo, utilizando internet de las cosas, añadiendo que la vulnerabilidad aumenta con la unión de las tecnologías de información y las operativas.

Cabe señalar que en 2017 se creó la Política Nacional de Ciberseguridad, que genera una serie de protocolos para los organismos de estado en esta materia, además de formar un comité interministerial y el Equipo de Respuesta ante Incidentes de Seguridad Informática (CSIRT), que coordina la cartera del Interior, y cuya misión es fortalecer y promover buenas prácticas, políticas, leyes, reglamentos y estándares ante las ciberamenazas.

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Fuente: Revista Electricidad